La violencia contra las fuerzas de seguridad en Puebla cobró dos nuevas víctimas. Jesús Popoca y Alejandro Osorio, elementos del grupo Guardián y escoltas de Alberto Vázquez Osorio, Director de Grupos Especiales, fueron asesinados en un ataque con armas de alto calibre en Bosques de San Sebastián.
Los agresores, presuntamente integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), incendiaron una sucursal de Oxxo y lanzaron “poncha llantas” para evitar ser perseguidos, huyendo rumbo a Clavijero y luego al Periférico con dirección a Amozoc.
Cabe destacar que Alberto Vázquez Osorio había sido amenazado previamente por el grupo delictivo “La Barredora”, lo que refuerza la hipótesis de que el ataque fue un ajuste de cuentas.
El gobernador Alejandro Armenta expresó su solidaridad con las familias de los policías caídos:
“Expreso mi más profunda solidaridad con sus familias, amigos y compañeros de corporación. No están solos y cuentan con todo nuestro respaldo en estos momentos tan difíciles. Con determinación y en unidad con las fuerzas policiales, trabajamos para que estos hechos no queden impunes”.
Por su parte, el presidente municipal de Puebla, Pepe Chedraui, también se pronunció sobre el ataque, manifestando su apoyo y solidaridad con los familiares de los policías abatidos en cumplimiento de su deber.
Las autoridades han desplegado operativos en la zona para dar con los responsables, mientras la inseguridad sigue marcando un desafío para las fuerzas del orden en la entidad.
Al ser interrogado por el hecho, el vicealmirante Francisco Sánchez Gónzalez, Secretario de Seguridad Pública del gobierno del Estado de Puebla respondió «Ustedes ya saben como esta el tema ahí mas o menos, ellos -los policías caídos- formaban parte de la escolta de un mando de la policía municipal, no podemos asegurar nada, estamos coadyuvando con ellos (sic) para poderlos ayudar».
