
La relación entre México y Estados Unidos avanza en un nuevo esquema de cooperación bilateral. Tras una conversación entre la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y el mandatario estadounidense Donald Trump, se logró un acuerdo clave: pausar por un mes la imposición de aranceles del 25% a productos mexicanos y establecer mesas de trabajo en materia de seguridad y comercio.
Sheinbaum explicó que la pausa permitirá diseñar estrategias conjuntas que beneficien a ambas naciones. «Estoy segura de que en este mes podremos dar buenos resultados a su pueblo y al pueblo de México», afirmó.
Seguridad: freno al tráfico de armas y fentanilo
Uno de los puntos centrales del acuerdo fue la seguridad en la frontera. Trump propuso reforzar la vigilancia para evitar el tráfico de drogas, especialmente de fentanilo. México, por su parte, logró un compromiso sin precedentes: por primera vez, el gobierno de EE.UU. trabajará para impedir el ingreso de armas de alto poder a territorio mexicano, un problema que ha fortalecido a los grupos criminales en el país.
Sheinbaum enfatizó que esta colaboración no compromete la soberanía y que ambas naciones operarán bajo sus propios marcos de acción. «Desde el principio planteé que trabajemos en conjunto, coordinados, pero siempre con respeto a nuestras soberanías», puntualizó.
Comercio: estabilidad y competitividad frente a China
En el ámbito económico, el presidente Trump insistió en el déficit comercial de EE.UU. frente a México. Sin embargo, Sheinbaum reviró, recordando que la relación entre ambas economías es de socios estratégicos y que el intercambio comercial beneficia a ambos países.
«No se trata de un déficit, sino del resultado de un acuerdo comercial sólido. Nuestra sociedad es clave para seguir compitiendo frente a China y otras regiones del mundo», señaló.
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Un mes para definir el rumbo
Con la pausa en los aranceles y la instalación de mesas de trabajo, México y EE.UU. entran en una fase de negociación intensa. En los próximos 30 días, los equipos de ambas administraciones deberán concretar soluciones en seguridad y comercio, en un contexto donde la estabilidad económica y la lucha contra el crimen organizado son prioridades.
Sheinbaum dejó claro que México mantendrá el diálogo con firmeza, defendiendo siempre los intereses nacionales, mientras se construyen acuerdos que favorezcan a ambos países.